martes, 13 de septiembre de 2011

Analizan Sistemas de Producción Ovina en la Araucanía

El aumento de la rentabilidad de los sistemas productivos ovinos de La Araucanía será posible, sólo modernizando los sistemas actuales, incorporando tecnologías en el mejoramiento de praderas, manejo de pastoreo y/o nuevas variedades forrajeras, ajustando los manejos ovinos de carga, sanidad y genética a las condiciones edafoclimáticas.

Un sol primaveral de agosto fue el escenario ideal para el día de campo organizado por INIA Carillanca, Innova CORFO y el Consorcio Ovino de Chile, en el contexto del proyecto “Paquete Tecnológico para el Desarrollo de Competencias Técnicas de la Producción Ovina de La Araucanía”, ejecutado por este centro de investigación y que congregó a 200 asistentes, profesionales y productores AFC, quienes valoraron esta instancia de transferencia de conocimientos en el rubro. La actividad estuvo presidida por el Seremi de Agricultura, Jorge Rathgeb; el Director Nacional de INDAP, Ricardo Mege; ejecutivos de CORFO y directivos de INIA.

Cabe señalar que en La Araucanía existen alrededor de 21 mil productores ovinos, de los cuales 12 mil 836 son de subsistencia y 8 mil 850 de la Agricultura Familar Campesina (AFC). Tradicionalmente la producción se ha desarrollado en suelos marginales, con praderas naturales de baja fertilidad (79% de la superficie), limitando la producción de forraje. Los sistemas ovinos en esta región son principalmente extensivos, con un tamaño promedio del rebaño que no supera las 10 ovejas por unidad productiva. Una de las principales limitantes que afecta la rentabilidad del rubro es la baja disponibilidad y calidad de forraje, y su estacionalidad, ambos factores determinantes en la estructuración de los sistemas ovinos en términos de cargas animales y adecuación a las épocas de parto.

En tal sentido, el aumento de la rentabilidad de los sistemas productivos ovinos de La Araucanía será posible, sólo modernizando los sistemas actuales, incorporando tecnologías en el mejoramiento de praderas, manejo de pastoreo y/o nuevas variedades forrajeras, ajustando los manejos ovinos de carga, sanidad y genética a las condiciones edafoclimáticas. Estas temáticas fueron analizadas en el día de campo, mediante 4 módulos, donde los asistentes pudieron consultar y aclarar dudas con los profesionales de INIA, liderados por la investigadora Oriella Romero, y su equipo de trabajo Silvana Bravo, Carolina Quijada, Juan Levío y Francisco Gebahuer.

“La producción ovina es un rubro de gran importancia y con perspectiva en La Araucanía, ya que se encuentra arraigado en las explotaciones de pequeños productores, los cuales obtienen corderos de mayo hasta octubre, siendo comercializados informalmente de noviembre hasta febrero. Sin embargo, la producción ovina presenta diferentes problemáticas que afectan directamente la productividad y rentabilidad del rubro. La baja productividad de las praderas junto con la baja eficiencia en su utilización y alimentación suplementaria en los períodos críticos afecta la capacidad talajera con la que es posible sustentar praderas”, señaló Oriella Romero.

En cuanto a la sanidad, el problema más frecuente es el parasitismo, lo que afecta la tasa de crecimiento de los animales y de la lana. La gran mayoría de los productores no aplica normas de manejo sanitario específicas, lo que se traduce en un aumento de la incidencias de enfermedades que afectan la velocidad de crecimiento de los corderos y la calidad del producto, disminuyendo por consiguiente la cantidad de ovinos disponibles para ser comercializados. Por otra parte, los sistemas productivos presentan un bajo nivel tecnológico, existiendo un escaso uso de praderas sembradas y fertilización de estas.

Por tal motivo, un día de campo como el organizado por INIA Carillanca, Innova CORFO y el Consorcio Ovino, permitieron dar orientaciones importantes en manejo animal, sanidad y razas ovinas que permitan potenciar la rentabilidad del rubro. Sobre todo cuando en esta región los sistemas ovinos requieren de un ordenamiento espacial de sus recursos, mejorar la rentabilidad de los suelos, incorporar especies forrajeras y genotipos animales que permitan aumentar la producción y calidad.

Asimismo, los sistemas de producción ovina actualmente requieren de una modernización no sólo en aspectos productivos sino también en su forma de integrarse a la cadena productiva, donde la ASOCIATIVIDAD es un tema clave.

De la comuna de Lautaro participaron equipos técnicos de PRODER, PRODESAL, PDTI y pequeños productores campesinos.

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